Durante toda la Edad Media, las peras tenían una clara connotación sexual y (como tal) de pecado. De hecho, los autores de novelas medievales situaban a los personajes que tenían relaciones sexuales bajo un peral, sobre todo cuando se trataba de relaciones “ilícitas”.
Y si a eso (plátanos aparte) le añadimos que todos los males del universo (todos, todos y todos), provienen de una manzana… blanco y en botella.
Que no voy a ser yo quien diga que la fruta sea mala, no, pero da que pensar.
... historias extra-ordinarias
Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"
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