Tiene razón. Yo evito escrupulosamente hablar de militancias. No lo hago por comodidad, sino por la creencia, más bien certeza, de que la disputa sobre doctrinas y principios se desarrolla en un plano completamente distinto al de mis propias ideas y esfuerzos.
No dudo de que detrás de las ideologías hay mucha buena fe (y también algo de desesperación); incluso que la mayoría de sus participantes son personas humanas, pero los programas y las filosofías cada vez me parecen más simples y estúpidos y no puedo dejar de pensar que entre cualquier grupo de personas estatificadas y organizadas no hay nada más raro que lo racional y natural.
No sé si el mundo ha mejorado, si no ha sido siempre igual de bueno e igual de malo. Lo que sí sé es que si el mundo ha mejorado gracias a los hombres, si gracias a los hombres se ha hecho más rico, más vital, más alegre, más arriesgado, más divertido, no se debe a los políticos, sino a los auténticos "egoístas", que no conocen ni un norte, ni se proponen metas, que se contentan con vivir y ser ellos mismos.
¿Confundido? Posiblemente, pero en esas estoy.
... Arpías: o de ave a mujer
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