Un señor entra con una gallina en una tienda, la gallina empieza a comerse todo lo que encuentra sin ningún control. Una de las empleadas le pregunta al señor: oiga, ¿qué hace con esa gallina y cómo es que tiene tanta hambre? Ya ve, iba yo por el desierto, me encontré con un genio en una lámpara y le pedí un deseo: una polla insaciable.
Y luego yo quejándome de lo malo que era ese otro de que los políticos solo devuelven la pasta cuando le sientan mal los macarrones.
En el bluemonday, científicamente demostrado como el día más triste del año (la fórmula que lo aclara no puede ser más evidente: 1/8C+ (D-d) 3/8xTI MxNA) no puedo más que pedir, aunque solo sea por salud mental, baja laboral ya.
Son crueles.
... condena bíblica.
Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"
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