No me hace ninguna gracia ser una máquina, hacer cada día lo mismo, seguir las mismas costumbres, actividades y rutinas día tras día. Da la sensación de que nada cambia ni nada nuevo sucede.
Sin embargo, he de reconocer que cuando ocurre todo lo contrario, contratiempos, horario desordenado, acontecimientos imprevistos... y siento que controlo las cosas, me angustio.
Haga lo que haga siempre quiero hacer lo contrario.
Lo de los pensamientos positivos un lunes… como que no.
... ventosa
Todos los "capítulos" de "tantos hombres y tan poco tiempo"
No hay comentarios:
Publicar un comentario