Las Real Dolls son un invento japonés aunque varios países las producen desde hace años. Gozan de fama mundial gracias a sus cualidades físicas y tecnológicas; son el juguete para adultos más demandados debido a su hechura de látex, vinilo y estructura metálica. Además, pueden emitir frases y gemido pregrabados de acuerdo al gusto de cada cliente, quien puede pedir sus acabados y perfeccionarlas con maquillaje, pelucas y otros accesorios.
Pero tienen un gran problema: son muy caras.
Por eso, uno no tiene más que sentir cierta clemencia por el pobre señor de la notica: La policía de la ciudad de Cairns, Australia, ha detenido a un hombre de 23 años que había entrado cuatro veces a un sexshop para, textual, "abusar sexualmente" de muñecas inflables, a las cuales dejaba tiradas en un callejón cercano al establecimiento. Fue detenido durante su quinto intento.
Vale, no es un artículo de primera necesidad (¿), pero que solo los ricos puedan tener a su alcance algo tan necesario… pues molesta. Además, que un ansión lo puede tener cualquiera. Y ya si le coges el gusto…
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